Hace mucho que no vuelvo al instituto, más o menos desde que me acerqué a ver mis notas de selectividad, y ya hace más de diez años. Aunque ya empieza a hacer más de 10 años de muchas cosas. Cuando pienso en los años de instituto, y consigo bajar un poco la niebla del tiempo, recuerdo sobretodo las horas fuera de las clases, los amigos, las aventurillas,... Una de las aventurillas que más recuerdo fue cuando jefatura de estudios decidió hacer pagar a cada clase, por los desperfectos que se habían ocasionado. En nuestra clase se protestó bastante, y finalmente decidimos, pagar la suma total, pero en pesetas, es decir en monedas de peseta. Cada uno reunió la cantidad que le tocaba (unas 70 Ptas.) en monedas de peseta. Eso era igual de difícil entonces como ahora encontrarlo con monedas de céntimo. La cosa parecía divertida, cada día había más monedas, la bolsa iba creciendo, y hubo que hacer turnos para llevarla porque pesaba mucho. Cuando llevábamos como 500 Ptas., en un pase entre nuestra pareja cómica (en todas las clases había una pareja cómica), se cayó todo en el suelo, y nos pasamos la clase de matemáticas, recogiendo monedas. Al final hubo que admitir monedas de 2 Ptas., porque sino era muy difícil conseguir todo el dinero. Cuando terminó el plazo teníamos una bolsa de 4 o 5 kilos de monedas, que llevamos al Jefe de estudios, diciéndole que creíamos que estaba todo.
Hubo otras aventurillas, que incluyeron, fugarse de clases, sexo, drogas, escupitajos a profesores, leyendas urbanas (¿sigue circulando el que decía que un profesor había preguntado que era la risa, y solo aprobó el que respondió Jaja?, ¿la chica que corrió desnuda por los pasillos?),....
La verdad, es que lo más hecho de menos, es la cantidad de tiempo que disponía, y eso que parece que había poco, el descubrir tantas cosas, y sentir que estas haciendo algo que no debes.
Pero, ¿cómo se vive ahora el instituto?, de verdad ha cambiado tanto y a peor como dicen las malas lenguas, o es que nos hacemos viejos, y todo tiempo pasado parece mejor.
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