Hace unos días hice un comentario sobre mi nuevo perro Kimba, y mi hermana ha subido unas cuantas fotos escaneadas de la Kimba mitológica.
Aunque puede parecer un poco tonto, me puse a llorar nada más ver las fotos. Pero para mi esta perrita, será todos los perros ya, porque estuvo conmigo desde los 10 a los 18 años. Justo murio en el trimestre que empezé en la universidad.
En la foto estamos mi hermana y yo posando delante del coche de mi padre, y de la casa de Gines. Yo iba así siempre todo el verano. Incluso fui a una academia de mecanografía así. La vergüenza, la salidad del Paraiso, fue cuando empezaron a salirme pelillos en los sobacos :), y empecé a vestirme todo el año :(
Kimba era tan especial, primero porque sobrevivió mucho tiempo, más que ningún perro en mi familia (así somos :), segundo porque misteriosamente nos entendía, sabía cuando era fin de semana, cuando podía entrar en los sitios, cuando no...
Y porque revivió 3 veces. La primera vez cuando la piso mi padre con el coche, el coche que se vé en la foto.
La segunda vez, cuando mi abuelo José le tuvo que hacer la cesarea en vivo, con una cuchilla de afeitar, y la cosío con hilo de coser zapatos. Evidentemente sin anestesia, se dejo operar sin rechisar. Y cuando volvimos del colegio allí estaba con la barriga como Frankestein, y apenas capaz de respirar.
Y la última la piso un camión en medio de una carretera, o eso nos dijeron. La perra desapareció durante 2 días, el tercer día llego arrastrandose, con los cuartos traseros inmovilizados, y llorando. Había necesitado 3 días para recorrer 500 metros.
Supongo que todos tenemos recuerdos imborrables, de cuando somos pequeños, muchos de los míos estan asociados a una perra casi totalmente negra, que levantaba del suelo un palmo.
yo también tenía un perro que, sigue viviendo en mis memorias. no era mítico ni ha sobrevivido tres muertes, pero ha salvado los bienes de mi familia cuando era yo aún muy pequeña. entraron unos ladrones a mi casa a robar -no sé qué hubiera podido robar, pues no creo que tuviésemos cosas interesantes que les fueran valiosas... al final nos han robado unas cucharitas de oro. pero lo peor es que le había hecho un gran daño a mi perro haciéndole un corte en el cuello. pues había estado ladrando todo el tiempo hasta que mi padre saliera al patio. nadie pensaba en el perro, sólo pensaban en las materias que aún no habían sido robadas. el perro se acercaba a mi con tanta pena que no me costaba nada en descubrir su herida(¡era tan grande como yo!). cuando grité del susto, mis padres lo llevaron al veterinario... volvieron sin él. me dijeron que se había encontrado con su familia y que no volvería jamás.
ResponderEliminarQue historia tan triste. Lo siento.
ResponderEliminarEn cuanto a lo mítico me refería a mi vida, y a cuantas veces he contado la mísma historia, nada más.
hola,
ResponderEliminaresto no tiene nada que ver con tu entrada. Pero como ya sabes que tengo insomnio, te escribo desde Paris; desde un teclado frances, que lio; me han cambiao las teclas de lugar,por no hablar de los acentos. La casa de la tia de Eli es fascinante; antigua,millones de libros, un telex, flipa; montones de recuerdos y montones de detalles pequenos.aqui me gustaria vivir,parece sacada de una novela antigua, no se si me gusta mas paris o esta casa; fascinante. Hasta me gusta el cafe soluble, debe ser la casa.Todavia es de noche, pero en cuanto amanezca me voy a una cafeteria preciosa a tomar un buen cafe y a ver si consigo El Pais.
joer maricarmen :)
ResponderEliminarno esta bien eso de madrugar tanto :)
Me puede imaginar la casa, y tu visita por Paris pasalo supeeeer bien.
un beso